28 de mayo de 2016
Era martes cuando me llegó una invitación para participar en la Spartan Race Super del Sábado. Tenía 4 días, no para entrenar, que ya de poco me iba a servir, sino para decidir si me lanzaba a intentar acabar una Spartan Race con sandalias, que es como habitualmente corro, y sin una preparación física específica. La mejor manera de disipar las dudas, era probar ¡AÚ, AÚ, AÚ!