Segundo entrenamiento de la Oxfam Intermon Trailwalker. Hoy tocaba madrugar de nuevo y desplazarse hasta el Valle de Lozoya para seguir entrenando y haciendo fotos de otros tramos (Morcuera,
Canencia, Garganta de los Montes, Gargantilla de Lozoya, Navarredonda y Lozoya) de esta aventura en la que vamos a participar mi mujer yo el próximo mes de julio, eso sí, cada uno con por su lado, en el equipo de su empresa.
24 de mayo de 2014
Hace 15 días ya entrenamos por los tramos 2 y 3 (Entrenamiento Oxfam Intermon Trailwalker – Tramos 2 y 3 – De marcha por la Sierramadrileña), los más duros,
Quedamos
para este entrenamiento 7 marchantes de un total de 4 equipos diferentes. El plan de hoy
era andar y reconocer los tramos 4, 5, 6, 7 y si no se nos hacía de noche, el
8.
Los perfiles
de estos tramos son mucho más favorables que en entrenamiento anterior, hay
alguna subida pero la mayoría de los kilómetros son en descenso, que ya subimos
bastante el otro día.
Tramo 4: Refugio de la Morcuera – Puerto de Canencia (9,7 km).
La ruta en wikiloc --> aquí
Pues empezamos el entrenamiento donde lo dejamos hace 15
días, en el refugio de la Morcuera, solo que hoy hace bastante más frio que la
vez anterior, echo de menos unos guantecillos.
La primera parte del tramo va por la carretera M-611, unos
800 metros, para coger después un camino a la derecha, el GR10.1, que entre
vacas nos va conduciendo hacía los Altos de la Morcuera. Enseguida llegamos a
una subida de unos 2 km. (aproximadamente del km. 1,5 al 3,5, el resto del
tramo será bajada.
El piso, salvo los primeros 800 m. de asfalto, es pista
forestal con bastante piedra suelta. Hoy estreno nuevas zapatillas (New Balance
Minimus MT1010v2) y creo que he hecho buena compra, son minimalistas pero poco. Con
tanta piedra todavía no tengo los pies suficientemente duros para andar con las
otras (New Balance Minimus MT10v2). La diferencia entre las nuevas y las
viejas, sobre todo, es la suela, mucho más dura en las nuevas.
El paisaje a lo largo de la parte más desarbolada de este
tramo es amarillo, las genistas ponen esta nota de color, además grandes pinos
y bonitas vistas al valle del Lozoya.
Para los que piensen alternar Caminar Correr, esta bajada de
unos 7 km. puede ser un buen tramo para trotar, pero con cuidado de donde pones
el pie.
Casi sin darnos cuenta llegamos al Puerto de Canencia, zona
“urbanizada” para excursionistas: parking, merendero, etc., donde se supone
estará el punto de control el día de la carrera.
Según nuestros relojes nos sale algo más 10 km. que nos ha
llevado 1 h. y 44 minutos. Un ritmo medio de 5,87 km./h ó 10,13 min/km.
Tramo 5: Puerto de Canencia - Canencia (5,3 km).
La ruta en wikiloc --> aquí
Hacemos un descanso en el merendero para tomar algo sólido,
hacernos una foto, quitarse algo de ropa (algunos, yo no) y seguimos a por este
nuevo tramo.
Cruzando la zona de aparcamiento sale un camino entre pinos,
este es el que hay que coger (PR-28).
No es muy complicado de seguir pero sí
que tiene un par de puntos de bifurcaciones y dudas. El primero es en el
kilómetro 1 aproximadamente, en unos pocos metros el camino se divide en 3, el
correcto es el de más a la izquierda. En el kilómetro 3 también hay una
bifurcación que nos hizo dudar, el camino correcto es el de la derecha,
siguiendo la PR-28.
El piso sigue siendo pista de tierra poco regular y con
piedra suelta. Otro tramo para trotar, todo bajada, pero con cuidado de donde
pisar.
El paisaje sigue siendo de grandes masas de pinar y ahora
cambia el color del campo, pasando del amarillo al malva del cantueso, planta parecida
en forma, color y algo en olor a la lavanda.
Entramos en el pueblo hasta el punto donde pondrán el control: “El Grupo
Escolar Carlos Ruiz”. Viendo las dimensiones de la calle y de la zona me cuesta
imaginar allí un punto de control con más de 100 coches de asistencia, más los
propios de la organización ¿?.
Tramo 6: Canencia – Garganta de los Montes (6,8 km).
La ruta en wikiloc --> aquí
En Canencia tenemos la primera baja del grupo, por
compromisos familiares uno se tiene que ir. Por ello habíamos dejado allí su
coche antes de iniciar la ruta y habíamos aprovechado para dejar en su maletero
avituallamiento sólido más contundente, prendas de cambio y agua para rellenar
los “camelbag”. Ahora si me quito la segunda capa y me cambio de zapatillas, no
quiero excederme con las nuevas zapatillas, aunque no noto nada negativo, y
quiero sentir la diferencia con las viejas (como así fue) y seguir curtiéndome
los pies con ellas.
Tras medio bocata, un plátano, algunos anacardos con pasas,
en fin “alguna cosilla” para reponer fuerzas continuamos la marcha. No vemos
muy claro por donde salir del pueblo para coger el camino hacía Garganta de los
Montes, pero finalmente preguntamos y encontramos la calle Cantarranas por donde
salir del pueblo en la buena dirección.
Salimos del pueblo por un camino asfaltado (o cementado)
dejando a la izquierda un helipuerto. Seguimos adelante por el camino, no vemos
ningún otro, hasta que nos damos cuenta, tras hacer el camino una curva muy
cerrada, que no puede ser el bueno. Volvemos a bajar hasta el helipuerto para
buscar el camino correcto, que según el mapa, tendría que salir por la
izquierda. Lo encontramos, pero no es muy evidente, sale entre los árboles y
está bastante cubierto de hierba, pero ese es.
Comenzamos a subir, de nuevo, durante aproximadamente 2 kilómetros vamos subiendo por un camino ancho y verde bordeando Peña Gorda (a la derecha) y contemplando la panorámica del Valle del Lozoya por la izquierda. Después todo bajada, el primer kilómetro con mayor pendiente.
Es recomendable llevar un botiquín, para la carrera es
obligatorio, nosotros tuvimos que usarlo, una de las integrantes del grupo, de
la que no daré el nombre por no dejar en evidencia a mi mujer, tropezó con una
raíz y cayo de bruces al suelo. Unos metros más adelante, por solidaridad con
ella (no por torpeza) me caí yo también al írseme el pie en una piedra mientras
corría para coger al grupo, como solía hacer cuando me quedaba rezagado
haciendo fotos.
Después del percance y de cruzar el arroyo, se coge el
Camino de la Dehesa que nos llevará directamente hasta el pueblo.
Tramo 7: Garganta de los Montes - Gargantilla de
Lozoya (8,4 km).
La ruta en wikiloc --> aquí
Desde la plaza del pueblo después de cargar fuerzas nos
dirigimos hacia la parte alta del pueblo, pero no… teníamos el mapa al revés. Hay
que salir por la parte baja del pueblo pero hacía la derecha según bajas,
habíamos venido por la izquierda, siguiendo una vía pecuaria, el camino de Los
Prados de los Montes. Cruzamos por encima la vía del tren a la salida del
pueblo y seguimos el camino hasta antes del kilómetro 4 donde cruza la
carretera M-629.
Poco antes de llegar a la carretera se supone que hay algún
desvío para bajar a la vía del tren, pero no lo vimos, así que llegamos hasta
la carretera y por la carretera fuimos hasta el puente que cruza la vía y… por
donde y como pudimos (casi arrastras) bajamos a la vía del tren.
Una vez en la vía del tren, hay que seguir por ella unos 3
km. hasta llegar al antiguo apeadero de Gargantilla. Al principio hay que ir
por la vía, sobre las piedras de
balastro (lo mejor para mis pies con zapatillas de suela de plastilina) pero
luego se puede ir por una senda paralela a la vía.
Siguiendo la vía del tren, también hay que cruzar el puente
que cruzaba el tren. Los que tengan vértigo id mejor por la parte central, por
dentro de la vía.
Cuando llegamos al pueblo, ya nos estaban esperando tomando una cerveza en una terraza dos de los componentes del grupo, que por problemas de ampollas en los pies, había preferido atajar desde el apeadero por un camino mucho más corto.
Tramo 8 (2ª parte): Navarredonda – Lozoya (7,2 km).
En este punto y después de la cerveza en la terraza del bar
hay dos marchantes que se retiran y otros cuatro que queremos seguir.
Como se
nos hace muy tarde para hacer el tramo completo decidimos subir en coche hasta
Navarredonda y hacer andando sólo la segunda parte del tramo: desde
Navarredonda a Lozoya.
La ruta en wikiloc --> aquí
Así lo hacemos, subimos en coche (previamente los habíamos dejado
estratégicamente distribuidos a lo largo del recorrido) hasta Navarredonda y
desde allí partimos tras preguntar a un paisano por el camino a Lozoya.
Este recorrido (aunque no lo parezca en la foto del perfil
que he puesto, sí en la ruta de wikiloc) tiene unos 2 kilómetros iniciales de
subida hasta coronar (100 m de desnivel ascendente) y el resto hasta Lozoya es
bajada (200 m. de desnivel descendente)
Igual que en otros tramos, vamos encontrando zona de roble y
zona de pino y algunas novedades como una zona donde había bastantes peonias.
Respecto a la fauna algo vimos además de las vacas, como una perdiz que nos
hizo de “liebre” durante una parte del camino o una culebra en mitad del camino
pero esta estaba ya un poco KO.
El piso de este tramo es pista forestal con piedra suelta. La panorámica frontal es el embalse de la Pinilla y al fondo Peñalara, según vamos bajando, se va acercando.
Para culminar la faena incluso nos animamos a correr durante
1 kilómetro para cambiar de ritmo.
Y así llegamos a Lozoya, el punto de control estará en el
polideportivo pero el último coche lo tenemos en el centro del pueblo, por lo
que tenemos que andar algo más.
Así terminamos el último tramo, nos salen 8,14 km. en 1 hora
y 19 minutos a un ritmo medio de 9:42 min./km ó 6,18 km/h.
Terminamos el día con una merecida jarra de cerveza, no de maíz
como los tarahumaras sino Mahou. Hemos andado casi 45 kilómetros desde que empezamos
a las nueve veinte de la mañana.
Terminamos cansados pero no tanto como el entrenamiento anterior donde la mayor parte del trazado era cuesta arriba. Lo que pasa es que el día de la carrera ¡¡Serán los dos seguidos más otros 20 kilómetros de propina!!!
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